Columna de Iván Violic: Ingenieros en la crisis del COVID-19
En estos tiempos difíciles, de aislamiento e incertidumbre, tenemos más tiempo para reflexionar sobre el vertiginoso e implacable avance de la crisis del Coronavirus. No voy a opinar sobre la pandemia y las medidas que están implementando las autoridades, solo cabe acatarlas y apoyar su gestión. Dicen, que antes éramos 19 millones de entrenadores de fútbol y hemos pasado a19 millones de expertos en epidemiología, entre los que destacan algunos políticos, que por la seguridad con que hablan, parecen tener estudios superiores sobre el tema, así es que dejemos este tema a los especialistas.
En primer lugar, me adhiero al aplauso y agradecimiento general por la abnegada labor del personal del área de salud: médicos, enfermeras, tecnólogos, personal de apoyo, en quienes confiamos nuestra salud; el bien más preciado que tenemos y del que a veces no apreciamos cuando estamos sanos. Los medios de comunicación han destinado buena parte de su tiempo en destacar la gestión del área de salud. Pero, quisiera destacar también la gestión del gremio de los ingenieros, que, en forma reservada, como es su estilo, nos apoyan en el día a día con su gestión para mantener funcionado nuestra sociedad. Todas las especialidades de la ingeniería están haciendo un aporte fundamental. Partiendo por el área de telecomunicaciones, fundamental para reorganizarnos hacia el teletrabajo y para mantener el contacto social con familias, amigos y colegas de trabajo, además de permitirnos acceder a la tan necesaria información y entretención en este período de aislamiento físico. Así, también podemos seguir con los ingenieros que laboran en los servicios básicos, que nos proveen de agua potable, servicios sanitarios, energía eléctrica, mantención de hospitales y supermercados, junto con manejar las complejas necesidades logísticas y de transporte, no solo en la Región Metropolitana, sino que a lo largo de todo el país.
Al mismo tiempo tenemos los profesionales de la Ingeniería Comercial, Industrial y Economía que tienen la difícil misión de balancear la protección de la salud, con las necesidades económicas de la población, asegurando las condiciones para una pronta recuperación de lo que parece ser la mayor crisis económica de la era moderna.
La historia nos muestra que siempre, después de periodos de oscuridad, no sabemos de cuantas semanas o meses más, llegará la luz y como ingenieros debemos estar preparados para liderar con fuerza y vigor las actividades, levantando y poniendo en marcha las empresas, la producción de bienes, las construcciones o proyectos ahora detenidos, y las necesarias obras públicas, que nos permitan normalizar el funcionamiento de la economía y el bienestar de nuestros compatriotas. Mientras tanto, desde la cuarentena, reitero el agradecimiento a los profesionales de la salud y también a los ingenieros y otros trabajadores por esa labor, a veces poco conocida, que nos está permitiendo continuar con el funcionamiento de la sociedad, y cuídense porque los necesitaremos a todos bien para superar los enormes desafíos que vienen.
Ivan Violic
Presidente Consejo Zonal Metropolitano
Colegio de Ingenieros de Chile