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Entrevista a Ricardo Nicolau del Roure, Premio Infraestructura CI 2023

Entrevista a Ricardo Nicolau del Roure, Premio Infraestructura CI 2023

Toda una eminencia en el gremio es el ingeniero civil estructural Nicolau del Roure, graduado de la Universidad de Chile con un Ph.D. y M.Sc. de la Universidad de Texas, Austin, quien ha sido galardonado con el prestigioso Premio Infraestructura. Su destacada trayectoria lo ha llevado a desempeñar un papel protagónico en una serie de proyectos de Infraestructura de importancia nacional en Chile. Entre estos proyectos se incluyen diseños de obras de vialidad, diseño de puentes, y revisiones de diseños puentes, como Amolanas y Chacao, centrales hidroeléctricas, como Alto Maipo, la expansión Los Broces y su complejo mineroducto, ampliación fundición de Chuquicamata, los tranques de relaves Las Tórtolas y El Torito, de Disputada de Las Condes, Ovejería y Pampa Austral de Codelco y El Mauro de Pelambres, Relaves al Valle de Andina. Interconexión vial Valparaíso-Viña del Mar, MERVAL . El nuevo aeropuerto de Santiago y luego los anteproyectos de los aeropuertos concesionados de AMB, Carriel Sur, El Loa , Florida y nuevo aeropuerto de Temuco. En el Metro; extensión túneles y proposición de estaciones tuneleadas para Línea 5, en Línea 4 el tramo en túnel Tobalaba -Simón Bolivar y también Linea 3. Estudio del paso alternativo al Cristo Redentor, Túnel Las Leñas, entre otros. Su contribución y liderazgo en estos proyectos han sido reconocidos con este importante premio, destacando su compromiso con la excelencia en la gestión de infraestructura clave para el desarrollo del país.

Te invitamos a conocer un poco más acerca de este destacado ingeniero, quien además fuera presidente del Instituto de Ingenieros.

"Con los años, todas esas experiencias y vivencias se van acumulando y permiten identificar, o entender tempranamente, los reales problemas de un proyecto y entonces buscar “entre las canas”, las posibles soluciones, o bien, comprender que se requiere recurrir a otros expertos"

¿Cuáles fueron los desafíos iniciales que enfrentó en su trayectoria profesional?

Pienso que experimenté los desafíos normales que todo ingeniero joven e inexperto vive, cuando en su trabajo se enfrenta a un problema o proyecto real. Estaba bien preparado para hacer y revisar cálculos y cubicaciones, pero no tenía la visión de las diferentes dimensiones que tiene un proyecto real y cómo ellas influyen, y en muchas ocasiones, definen o determinan los cursos de acción a seguir. Afortunadamente tuve la guía y los consejos de grandes y experimentados ingenieros, quienes con paciencia me fueron ilustrando y mostrando los caminos que llevan a diseños y proyectos exitosos.

En retrospectiva, tuve una etapa de “maestro-aprendiz” muy positiva y que siempre ha sido indispensable para el buen ejercicio de las profesiones liberales. Etapa formativa que en la actualidad se ha perdido o reducido y ello tiene consecuencias negativas.

¿Cuál es el proyecto en el que ha trabajado, que le ha generado mayor aprendizaje?

Difícil pregunta, pues aunque he realizado esfuerzos para identificarlo, no logro encontrar uno en especial y la conclusión a la que llego es que, todos los proyectos, los grandes y los más modestos, siempre alguna lección me dejaron. Ya fuese por aspectos técnicos, de organización, de relaciones humanas, o simplemente por las personas y lugares en que ellos se asentaban. A la postre, y con los años, todas esas experiencias y vivencias se van acumulando y permiten identificar, o entender tempranamente, los reales problemas de un proyecto y entonces buscar “entre las canas”, las posibles soluciones, o bien, comprender que se requiere recurrir a otros expertos

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¿A que Ingeniera o Ingeniero admira?

Otra compleja pregunta. La verdad es que a muchos, pues en las distintas etapas de la vida profesional van apareciendo, primero grandes profesores que marcan a sus discípulos, luego durante el ejercicio de la profesión se interactúa con connotados especialistas y también a otros que uno conoce y aprecia al estudiar sus publicaciones o conocer sus logros. Pero si debo mencionar a uno, elijo al ingeniero chileno Aurelio Lastarria, quién a fines del siglo 19 diseñó y construyó el Viaducto del Malleco, magnifica e imponente obra de ingeniería todavía en uso y que su diseño y construcción, aún hoy, constituiría un desafío mayúsculo.

¿Qué cree hace falta en la formación de Ingeniería?

Considero que, en líneas generales, las principales facultades de ingeniería del país están conscientes que en la actualidad los perfiles de egreso y las mallas curriculares deben estar en permanente evolución. Como resultado de esta realidad las Facultades de Ingeniería responden razonablemente a los requerimientos y sus niveles de excelencia son reconocidos. No obstante, como practicante de la profesión, puedo señalar algunas debilidades que se advierten entre las competencias de los ingenieros del siglo 21:

Adecuada capacidad para expresar ideas de manera coherente y fluida, tanto en forma escrita como oral; Manejo, al menos instrumental, del idioma inglés. Una necesidad imperativa; Habilidades mínimas para trabajo en equipo e interactuar con otras disciplinas; El ejercicio de la ingeniería es cada vez más multidisciplinario.

Infraestructura y desafíos

¿Qué elementos innovadores o creativos destacarías en tu enfoque

hacia la Infraestructura?

Durante muchos años argumenté con algunos altos funcionarios públicos que las obras de infraestructura, cuando se prestasen para ello, debiesen considerar una componente estética, ya que ello no representaba un aumento de costo relevante y aportaba al entorno, aspectos que era posible apreciar en los países desarrollados. Pero siempre fui rebatido por los mayores costos. Sin embargo me parece que este concepto finalmente está permeando y ya hay algunos casos interesantes, como el nuevo puente ferroviario sobre el Biobío en Concepción, al que se le ha proyectado una superestructura arquitectónica, que realza su perfil de más de dos kilómetros de longitud y que se iluminará en la noche.

¿Cómo considera el impacto social y ambiental en los proyectos de Infraestructura y qué medidas se implementan para minimizar los impactos negativos?

Los proyectos de infraestructura por sus dimensiones y extensiones, siempre generan algún tipo de impacto ambiental, así como también generan impactos sociales. Por lo general los impactos sociales negativos son menores, y en un balance, son largamente superados por los positivos y/o beneficios. En la actualidad la evaluación de impactos sociales es rigurosa y sujeta a normativas y estándares de nivel internacional, las que consideran como una de las actividades o herramientas prioritarias, la participación temprana de las organizaciones comunitarias y de la sociedad civil. Por su parte, los impactos ambientales deben ser evaluados siguiendo la normativa ambiental vigente en el país, la que dependiendo de la magnitud y características de las obras involucradas, pueden requerir la realización de un Estudio de Impacto ambiental (EIA), o bien una Declaración de Impacto Ambiental. Estos estudios determinan, cualitativa y cuantitativamente, los posibles impactos ambientales y definen las medidas de mitigación o compensación de los impactos negativos identificados, así como la forma de medir y controlar las distintas variables ambientales, para verificar su cumplimiento.

¿Cómo aborda la colaboración y el trabajo en equipo en los proyectos?

El trabajo en equipo y la colaboración, entre sus diferentes participantes, constituye una de las características esenciales de cualquier proyecto, entre ellos, los de infraestructura. La manera de conseguir que esta suerte de química se genere, tiene mucho que ver con las personas y con el liderazgo que puedan ejercer tanto el jefe de proyecto, como aquellos que asumen responsabilidades de dirección y gestión en la organización. Así como también es imprescindible el compromiso manifiesto de todos con el resultado del trabajo. Por otra parte, contar con un buen clima de trabajo requiere, por un lado, definiciones claras de los roles y responsabilidades, y por otro, establecer muy tempranamente comunicaciones fluidas entre todos los participantes y con todos los niveles.

¿Puede compartir alguna experiencia significativa de colaboración, que haya contribuido al éxito de un proyecto?

En realidad tengo muchas buenas experiencias de trabajo en equipo y colaboración. La más singular quizás fue, hace muchos años, en un complejo proyecto para una empresa minera, que desarrollamos con un consorcio de empresas de ingeniería nacionales, después de ganar en una la licitación a las más reputadas internacionales. En las cabezas de las distintas disciplinas estaban varios de los socios o directivos de las empresas del consorcio, todos expertos en sus materias, quienes no estaban muy habituados a desempeñar roles bajo un jefe de proyecto. Los inicios del trabajo fueron de relaciones humanas difíciles, pero con tino, paciencia, privilegiando resolver los problemas técnicos y apelando al fin perseguido, a las pocas semanas se logró establecer un buen ambiente de trabajo y el proyecto concluyó exitosamente.

¿Cuáles son los desafíos más relevantes que enfrentas en la actualidad?

Varios y todos difíciles, como disminuir el ritmo de trabajo y los compromisos de tiempo con organizaciones gremiales y académicas, para dedicarle tiempo y energías a algunos proyectos personales, que he mantenido en barbecho por largo tiempo. Y muy importante, pasar más tiempo con la familia y visitara los nietos que viven allende los mares.