En el marco del segundo seminario online que realiza el Colegio de Ingenieros para conmemorar el Día de la Ingeniería, la presidenta de la Comisión de Educación del Colegio de Ingenieros y directora de la escuela de Ingeniería de la Universidad Finis Terrae, Felisa Córdova, abordó los desafíos que han enfrentado las casas de estudio en el contexto actual de crisis sanitaria.

Si bien la educación online había estado ganando terreno, la llegada del Covid-19 aceleró el proceso de adopción de esta tecnología y tanto profesores como estudiantes se han visto enfrentados a esta nueva realidad de golpe.

En su presentación, Córdova dejó en evidencia que, por el lado de los docentes, las carencias se visibilizan principalmente en el uso de plataformas digitales para impartir las clases y en los procesos de evaluación. Sin embargo, hizo énfasis también en otro punto: “Los profesores, si bien manejan los contenidos, no han variado su forma de entregarlos, y esta modalidad no mantiene a los estudiantes motivados e interesados asistir a las clases”.

Por otro lado, en el caso de los alumnos, la Universidad Finis Terrae ha desarrollado encuestas que han determinado que estos perciben lentitud en las clases, junto con un exceso de tareas exigidas y jornadas que duran más de lo habitual. “También hemos descubierto que a los estudiantes se les hace difícil interactuar en tiempo real, puesto que la plataforma se colapsa con tantos chats, por poner un ejemplo”, añadió Felisa.

Los desafíos del presente implican que tanto estudiantes como profesores asuman nuevos roles, colaborando de manera activa y colaborativa en el ambiente académico virtual. En un futuro libre de covid, la pregunta es: ¿Qué parte de la educación online deben permanecer? Ciertamente el escenario ha cambiado y para siempre: “La educación en la ingeniería tiene hoy la gran oportunidad de repensar la educación en este nuevo contexto y aprender de la experiencia de otras instituciones que ya han recorrido este camino. En este nuevo enfoque tenemos que considerar la política, el plan de estudios, la pedagogía, el uso de las TIC’s, la organización y la formación de docentes y las capacidades humanas requeridas para enfrentar esta nueva educación”, indicó la experta, al tiempo que hizo un llamado a la comunidad educativa a contar con “docentes innovadores, con habilidades y competencias acordes a este siglo y estudiantes jugando un rol activo en su proceso de aprendizaje”.