Infraestructura Aeroportuaria: El futuro se planea hoy
Se vuelve urgente planificar hoy la localización de plantas de producción o almacenamiento, rediseñar redes de distribución y asegurar la interoperabilidad con nuevas fuentes energéticas.
La reciente licitación del Anteproyecto Referencial del Aeropuerto Arturo Merino Benítez (AMB) representa una oportunidad estratégica para que Chile transite hacia una aviación descarbonizada, no solo como respuesta técnica a la demanda futura, sino como una plataforma clave para anticipar los desafíos del transporte aéreo sostenible. En este marco, el combustible de aviación sostenible (SAF) ya no es una alternativa: es una condición habilitante.
Vuelo Limpio, el primer programa nacional de sostenibilidad energética para la aviación, liderado por la Agencia de Sustentabilidad Energética, el Ministerio de Energía y la Junta de Aeronáutica Civil, impulsa la adopción de SAF producido a partir de biomasa, residuos, CO₂ atmosférico o hidrógeno verde. Al ser de sustitución directa, puede utilizarse en aeronaves actuales con infraestructura existente. Bajo la vía Power-to-Liquid, puede reducir hasta un 99 % de las emisiones de Gases de Efecto Invernadero, considerando su ciclo de vida completo.
Chile ha comprometido su adhesión a la meta de carbono neutralidad en la aviación para el año 2050 y lograrlo, requiere de infraestructura adecuada. El nuevo Plan Maestro debe considerar la coexistencia entre combustibles fósiles, SAF y eventualmente hidrógeno líquido, anticipando nuevas generaciones de aeronaves. Se vuelve urgente planificar hoy la localización de plantas de producción o almacenamiento, rediseñar redes de distribución y asegurar la interoperabilidad con nuevas fuentes energéticas.
La masificación del SAF enfrenta barreras económicas, pero también de infraestructura logística. Sin capacidad instalada para recibirlo, almacenarlo y distribuirlo, su adopción será inviable. La meta NetZero exige voluntad política, coordinación público-privada y una visión país que integre planificación energética y aeroportuaria.
La infraestructura aérea no es solo un tema técnico: es una decisión estratégica nacional. El momento de actuar es ahora. No podemos permitirnos despegar tarde.
Autora

Loreto Araya Zamorano
Ingeniera Civil en Obras Civiles,
Máster en Project Management y Diplomado en Infraestructura Aeroportuaria.
Lidera la Asociación de Profesionales Aeroportuarios y dirije el Diplomado en Infraestructura Aeroportuaria en la Universidad de Santiago de Chile.
Loreto cuenta con una amplia experiencia en diseño y evaluación de pavimentos, comportamiento de materiales y gestión de proyectos de gran envergadura en el sector transporte.
Asimismo ha destacado por su labor docente e investigadora, formando nuevas generaciones con excelencia técnica y compromiso.






