fbpx

Educación emocional en la ingeniería, columna de Loreto Marín

Autor: Loreto Marin Bley

Agradezco que mi camino profesional me llevó de vuelta a la educación, pues me permitió verme reflejada en los estudiantes de ingeniería. He ido recordando mis expectativas de los primeros años de carrera, con muchos anhelos que luego cumplí en mi vida profesional. Al comenzar a ejercer me di cuenta de lo prioritario que fue para mí la autogestión emocional y comencé un camino de desarrollo personal que me hizo la diferencia, en mi trabajo y vida familiar.

En los periodos de gran exigencia, como las pruebas solemnes o las presentaciones de cierre de proyecto, entre otros, el nivel de estrés que viven los estudiantes genera en muchos un impacto negativo en la salud: baja concentración por estar agotados, sufren insomnio, cambios negativos en sus conductas alimentarias o en algunos casos han vivido crisis ansiosas; mermando sus condiciones cognitivas para enfrentar este periodo de evaluaciones. Lamentablemente, algunos colegas, como fue en mi caso, continúan arrastrando en su carrera profesional los perjuicios del estrés, enfermando del corazón, colon irritable, crisis de pánico, entre otras.

Por este motivo es prioritario introducir en la educación de la ingeniería, desde primer año, técnicas que permitan autogestionar las emociones y que los convierta en protagonistas de su vida profesional. La pregunta clave es ¿Cómo entregamos estas técnicas a estudiantes para desarrollar estas habilidades prioritarias? Recomiendo incorporar de manera transversal técnicas de gestión emocional, que pueden basarse desde la respiración consciente a ejercicios físicos que construyan flexibilidad, vitalidad, aumentar la oxigenación al cerebro, purifiquen los órganos internos y prevengan lesiones por el sedentarismo, entre otras.

Al construir las habilidades de autogestión emocional, cada estudiante logra mejorar su estado anímico, construyendo las bases para sostener una actitud positiva ante los desafíos. Como se lo imaginan, las técnicas de autogestión emocional son un entrenamiento, es aprender a reconocer las sensaciones fisiológicas que se generan por las emociones y lograr entonces el desapego para gestionarlas. La construcción de estas habilidades requiere de auto compromiso y de reconocer el beneficio que implica la propia autogestión emocional. De este modo, naturalmente se va desarrollando la receptividad a los estados emocionales de los colaboradores, logrando la habilidad de guiarlos para alcanzar una meta común.

Desde mi perspectiva personal, considero prioritario entregar técnicas que mejoren la habilidad en la autogestión emocional desde las bases del camino profesional. Anhelo que las universidades sean gestoras del autocuidado, lo cual impactaría positivamente el resto de la vida de los estudiantes en el mundo profesional y familiar.

Loreto Marin Bley

Ingeniera civil industrial


Docente educación superior.

Facilitadora Desarrollo Personal en Amrit.yoga.terapia